lunes, 16 de julio de 2012

Contra el viento del norte (Gut gegen Norwind), Daniel Glattauer.


Sipnosis:



En la vida diaria ¿hay lugar más seguro para los deseos secretos que el mundo virtual? Leo Leike recibe mensajes por error de una desconocida llamada Emmi. Como es educado, le contesta y como él la atrae, ella escribe de nuevo. Así, poco a poco, se entabla un diálogo en el que no hay marcha atrás. Parece sólo una cuestión de tiempo que se conozcan en persona, pero la idea los altera tan profundamente que prefieren posponer el encuentro. ¿Sobrevivirían las emociones enviadas, recibidas y guardadas un encuentro "real"?

La mala lengua dice:


Cuando te lees la sipnosis, y te hablan de él, y lees sobre él, piensas que va a ser una lectura vacía, fácil, la típica de amor por error con final feliz, o catastrófico, pero con final. Sin embargo, una vez que lo hojeas y ves que sólo aparecen emails en él, te das cuenta de que por lo menos el formato no es el mismo que el de otros tantos enamoramientos literarios para jóvenes. Y cuando empieces a leerlo comprenderás que ni es otra adolescente novela de amor con final (bueno, lo del final...), ni vacía, ni fácil. 
Sus largos mensajes esconden reflexiones sobre el amor, la familia, la soledad, la amistad, que, si no estás concentrado, necesitarás releer una y otra vez para entender su esencia. Y para más inri, siempre querrás leer el siguiente, y luego el siguiente, y el siguiente, y así hasta que de repente estás en la página 100, y ya que estás ahí sigues hasta la 150... En fin, una de estas novelas que te lees en un día, dos a lo sumo, y que cuando acabas te ha sabido a poco de tan rápido como se ha esfumado. 
Pero no, sé fuerte y no empieces inmediatamente después la segunda parte (Cada siete olas), que, hablando desde la experiencia, vas a acabar harto de emails, indecisión, piques y encuentros programados de los que luego apenas te cuentan nada. Lo bueno si breve, dos veces bueno. Deja un espacio de tiempo entre ambos, ése es mi consejo.
No pienso decir nada más sobre Cada siete olas, pues me leí la sipnosis antes de empezar Contra el viento del norte y me enteré del final del primero; ¡muy mal por parte del editor!


"La huida nunca es el final, sino su retraso."
"Una sola persona no es capaz de dárselo todo a alguien."

Y finalmente, como conocedor del idioma en que originariamente están escritas ambas novelas, felicito a Macarena González por tan buena traducción de los juegos de palabras y el texto en sí.
Recomendable 100%



Holis.

Te voy a contar mi vida, que lo sepas, así que si no quieres saber de ella, no la leas. Avisado estás, no quiero que vengas diciéndome que soy un pesado, porque voy a ser tu peor pesadilla.
Yo creo que no hay nada más que decir, ¿no? Si tienes dudas te miras las Páginas Amarillas... o este enlace, que salgo yo. Y si no encuentras lo que quieres, aun habiendo buscado en wikipedia, entonces puedes preguntarme. 
Es bromis, que yo soy muy majo.
Ea, 
pues besis.